Hace 4 años vivíamos en Venezuela y, estando de viaje por el matrimonio de mi hermano Gusy, Andres recibió una llamada que cambió nuestro rumbo.
Le ofrecieron un traslado a Nueva York.
Dos meses después habíamos desmontado nuestra vida en Caracas y llegábamos a NYC a formar una familia: nosotros 2, varias maletas y una barriga de más de 6 meses que resultó en mi lindo Andres Ignacio.
Hace 4 años nos cambió la vida en muchos aspectos. Cerramos un ciclo e iniciamos otro llenos de ilusión pero a la vez llenos de tristeza y nostalgia de las cosas lindas que dejamos atrás. Hace 4 años la familia era lo que más dolía dejar.
4 años han pasado y no podemos sino reconocer felicidad y bendiciones en ellos… Han sido 4 años llenos de cambios en nuestra vida, casi nada se parece a aquellos días de ser sólo pareja en Venezuela: las noches de ver películas y dormir hasta tarde los fines de semana; las largas jornadas de trabajo, los viajes a la playa, los almuerzos en familia cada domingo, la misa en la Tahona.
Ahora, 4 años después se abre otro ciclo que igualmente afrontamos con ilusión, aunque de nuevo es la familia que tenemos cerca la que más duele dejar.
Una nueva etapa comienza y ahora, 4 años después precisamente somos 4 y eso hace que todo se vea diferente, ahora los cambios no sólo nos afectan a Andres y a mi como pareja… De nuevo nos cambia la vida y un nuevo horizonte se abre para dar cabida a nuevas aventuras…
En menos de un mes nos mudamos a Houston.
Por ahora parece solo una idea, borrosa ante tantas cosas qué hacer y tanto qué despedir en nuestra amada NYC, pero cada día es una visión que se va volviendo más nítida y va cobrando más fuerza…
Hace 4 años nos cambió la vida, hoy de nuevo un cambio de vida toca nuestra puerta y decidimos abrírsela de par en par, para que entre con todo lo que tenga qué ofrecer…
Nosotros sabemos que si estamos juntos estaremos bien…
Houston, allá vamos, espéranos que nos estamos preparando para sacar lo mejor de ti y hacerte nuestra!