Amamantar es un arte, un ritual, una cita a la que acudir puntual cada vez que nuestro bebé lo necesita. Para amamantar hay que preparase, hay que tener ganas e información, hay que estar dispuesta, porque cuando se amamanta hay que sacrificar y hay que saber que aunque es un proceso natural, no siempre fluye como quisiéramos y a veces hay que salvar algunos obstáculos.
Amamantar parada, sentada, acostada, con un fular o una sola mano, en la misa o esperando en la clase de natación de los hermanos mayores puede parecer un acto instintivo, rutinario que no hay que pensar… eso cuando la lactancia está consolidada, cuando una ya se sube la blusa, saca el pecho disimuladamente y sabe como pegarse a su bebé o el bebé sabe cómo pegarse a una.
Pero al principio nos encontramos torpes, inexpertas, miedosas. Los senos son más grandes que la cabecita de nuestros bebés y los arropan de una manera que parece que los asfixiaran. Al principio existe teoría y técnica para que después sea natural e instintivo.
Con esta, mi tercera lactancia, lo he vivido y lo sigo viviendo. La actitud de Cristobal al comer está directamente relacionada a la posición en la que lo amamante. Si estamos en la casa casi siempre lo hago acostada en mi cama. Por un lado yo aprovecho esos minutos para desconectarme y descansar, por otro él se relaja mucho más, no se distrae, come sin interrupciones y muchas veces se queda dormido.
Pero si no es en mi casa o si me toca hacerlo mientras acompaño a Andres Ignacio o Eugenia a ver tele o jugar algo, si lo hago en el carro antes de bajarme en el supermercado pueden ser tomas mucho más entrecortadas.
Así que hoy les comparto una serie de fotos que tomé con mi mamá cuando todavía estaba aquí ayudándome después del nacimiento de Cristobal. Mi mamá es pura sabiduría en lactancia materna, en su consulta en lecheymiel ha atendido con todo su amor y toda su dulzura a miles de mamás enseñando un poco de lo que hoy vengo a mostrar. Hacer estas fotos con ella fue reafirmarme que sigo aprendiendo de ella todo lo que sé y hoy que las publico le agradezco de nuevo su amor, su apoyo, su paciencia, su ayuda, su sabiduría y su sensibilidad.
Sentada con el bebé apoyado en las piernas: supongo que esta es la posición más común. Hay que cuidar que el bracito del bebé quede bien y no lo presionemos. ayuda colocar un cojín o almohada debajo del brazo con el que sostenemos el bebé para darnos soporte.
Sentada con el bebé sobre el torso: Los brazos cruzados sobre la espalda del bebé y soportando la cabeza dan un soporte diferente y es una posición buena para controlar la cabeza del bebé y asegurar un buen agarre durante las primeras semanas.: esperar que abra bien la boca y meterla completa para que no rompa el pezón.
^^^ Y contemplarlo, aprendiéndote cada rinconcito de su cuerpo…
Posición de balón de Football: El cuerpo del bebé en vez de estar atravesado en nuestro torso, queda con sus pies hacia atrás. Sirve igualmente para tener buen control de su cabeza y asegurar un buen agarre y sirve para cuando baja la leche o los senos se ponen duros y necesitamos que el bebé tome de todos los conductos vaciándolos para descongestionar.
Apoyada sobre una almohada ergonómica: estas almohadas (la mía es Boppy) son una maravilla para aliviar el peso de nuestros brazos. Yo la uso mucho sentada en mi cama porque ahí no tengo soporte. Además el bebé al estar apoyado en la almohada me deja las manos «libres» para leer, revisar pendientes en el teléfono, etc. Y también sirven para acostarlos a ellos con la cabecita mas levantada medio sentados que les encanta.
^^^ Mis compañeros de lactancia! Les encanta que les cuente historias de cuando los amamantaba a ellos.
Parada: Esta posición es buenísima cuando el bebé se atraganta porque sale mucha leche. De alguna manera el flujo es menor y le permite relajarse succionando sin atragantarse por el exceso de leche en su boquita. Además cuando uno la domina, permite mecerlo y eso les encanta, los calma y los conforta.
Acostada: es mi favorita, la que más uso, la que más me gusta, la que me permite descansar y en la que mi bebé me patea y me encanta. Se puede amamantar acostada desde el principio y en esos días de cansancio nada mejor que aprovechar que estamos los dos acostados para hacer una siesta juntos.
^^^ Igualmente acostada pero en el sofá… Cristobal en estas fotos tenía 6 semanas, yo creo que ya ahí no cabemos…
Espero que estas fotos les sirvan, si tienen dudas visiten la página del Centro de Lactancia Materna de mi mamá (la Dra Antonieta Hernandez) lecheymiel, su Facebook o su Instagram. También pueden escribirle a antonieta@lecheymiel.org.
O escriban en los comentarios y yo les responderé con gusto.
Hola, felicitaciones, excelente iniciativa, tu madre ha sido y es una de mis motivadoras y maestras para dedicarme a la Consejería de la Lactancia materna. Excelentes fotografías para enseñanzas de las diferentes posiciones para amamantar.. Como dice el dicho » hijo de gato caza ratón» éxitos seguros.
saludos desde Pto Fijo la tierra de tu madre.