12 consejos para una lactancia materna exitosa

En lo que se refiere a Lactancia Materna yo tuve mucha suerte! Llegué a la maternidad con mucha información y muchísima sensibilidad al tema… Llegué convencida, llegué con la mejor consultora de lactancia y además pediatra a mi lado: mi mamá!

Desde que soy pequeña mi mamá se dedicó a todo lo relacionado a la lactancia materna y escuchar del tema, ver videos de bebés llegando por instinto al pecho, ver madres amamantando e incluso escuchar las dificultades y complicaciones era parte de mi vida…

Mi mamá dice que por haber ella ayudado a tantas mujeres a amamantar a su hijos, Dios le regaló un lactancia perfecta con su única hija mujer: yo!

Y no sé si sería ese regalo divino para mi madre, pero efectivamente yo tuve 2 experiencias de lactancia maravillosas, sin complicaciones, prolongadas, seguras… No tuve dolor, no tuve complicaciones, no hubo mastitis… Me fue fácil amamantar, conseguir un buen agarre, no tuve depresión post parto, mis hijos ganaron el peso que debían…

Sin embargo sé que las complicaciones existen, sé que la lactancia a veces no se presenta fácil ni sencilla, sé que las dudas atacan, que nuestros pechos no son de cristal y es muy fácil cuestionarnos nuestra capacidad de producir suficiente leche… sé que hay cólicos, malestares, poca ganancia de peso que pediatras atribuyen a la lactancia, sé que a veces hay una sociedad que no apoya a una mujer que amamanta, sé que da pena amamantar en público, sobre todo sé que nuestros bebés demandan nuestro pecho sin cesar y sin tomar en cuenta nuestro cansancio o falta de sueño…

Sé lo afortunada que fui, sé que no siempre es así y sé que son muchos los factores que entran en juego…

Pero también sé que precisamente haber crecido en un entorno tan cercano al rescate de la lactancia materna me abrió un camino y me ayudó en formas insospechadas… Y por eso hoy quiero compartir 12 consejos para lograr una lactancia materna exitosa… desde mi experiencia con Andres Ignacio y Eugenia.

Y acompaño cada consejo de una foto espectacular del CALENDARIO LECHEYMIEL 2015. Fotos llenas de una sensibilidad propia del acto de amamantar y ese contacto piel a piel que es tan importante para el bebé y tan placentero para la mamá. 12 fotos magistralmente tomadas por mi queridísimo Marco Mancera. Un calendario diseñado por mi favorito, Victor Zambrano, mi hermano mayor que le da vida gráfica a todos los sueños de mi mamá y lo hace TAN bien. 12 fotos producto del esfuerzo y el gran sueño de mi mamá, Antonieta Hernandez, por hacer que cada día más madres amamanten!

1.- Confía en tu capacidad de amamantar: yo creo que es súper importante saber que puedes, confiar que puedes amamantar, sin cuestionamientos a priori. No vemos salir la leche del pecho, pero ésta se forma de nuestra sangre y nunca dudamos si tenemos suficiente sangre en las venas… Es importante entender la lactancia, saber cómo sucede, entender que la leche cambia en una toma y lo sigue haciendo a través del tiempo, saber que esta llena de inmunología y que lo primero que sale es agua. La información es poderosa porque nos regala seguridad y la seguridad nos da confianza, y finalmente la confianza regala algo que en la maternidad, y sobre todo cuando se es primeriza, vale oro: tranquilidad! Así que confía y prepárate sin dudar de tu cuerpo.

2.- No cuentes las horas y disfruta: mi mamá suele decirle a las embarazadas en su consulta, citando al Gran Simón Diaz, que la lactancia «no tiene horario, ni fecha en el calendario, cuando las ganas se juntan». Y es que la necesidad de ir al pecho de nuestros hijos no es sólo cuestión de hambre… ellos quieren estar pegados a nosotras, abrazados, junto a mamá. Y al principio cansa y parece demasiado pero yo creo que si no contamos los minutos ni las horas, si logramos desconectarnos y disfrutar el momento y saber que se repetirá muy pronto, tendremos una expectativas más claras que de nuevo nos regalarán tranquilidad y seguridad!

3.- Asegura un buen agarre en los primeros días: para esto es importante saber que el bebé no debe succionar del pezón sino de la areola que es de donde se exprime mayor cantidad de leche sin hacer daño. La piel del pezón es muy delgada y sensible, y nuestros hijos saben succionar desde el día 1 con una fuerza inversamente proporcional a su tamaño. Lo más importante es estar pendiente y si es necesario pedir ayuda para que no llegue a romperse el pezón, porque eso duele mucho y se puede evitar con un bebé succionando correctamente.

4.- Acepta que a pesar de todo lo que sepas, puede ser difícil… pero no dudes: Hoy en día hay mucha información disponible sobre todos los temas de maternidad, incluida la lactancia. Y las mamás devoramos información en nuestro primer embarazo. Saber es una maravilla pero también es importante no olvidar que las circunstancias y la vivencia puede sobrepasar a la teoría. Por eso vale la pena investigar y documentarnos tanto como queramos, dejando siempre espacio al cambio y siendo flexibles al momento. Aunque sepamos mucho, la experiencia puede ser sobrecogedora y podemos no haber tomado en cuenta el impacto de nuestras hormonas, de nuestros miedos que son difíciles de anticipar. En esos momentos es bueno saber que muchas madres pasan por eso, que no estamos solas pero tratar de no dudar en nuestra capacidad sino buscar la manera de seguir avanzando.

5.- Asegúrate de tener ayuda y apoyo: tiene que ver con el punto anterior pero es bueno saber que hay mucha gente formada en lactancia materna: centros de lactancia, consultoras, doulas, familiares, otras madres que lo han vivido o lo están haciendo. El apoyo es fundamental porque la maternidad es una experiencia que puede estar acompañada de miedos, cuestionamientos y dudas y no hay mejor remedio para eso que la solidaridad, el consuelo y el apoyo de quienes saben del tema. No te sientas derrotada si tienes que pedir auxilio!

6.- Personas que estarán más cerca del cuidado del bebé, todos en sintonía: Sucede que venimos de ser una generación que poco fue amamantada por lo que es muy frecuente que madres, suegras, tías, amigas no entiendan la lactancia, menos si es libre demanda. Y aunque seguramente sus dudas y consejos vengan desde el amor hacia la madre o ese bebé amamantado, te pueden generar dudas e inseguridades. Así que lo mejor es que compartas tu decisión con quienes estarán cerca del cuidado del bebé, que entiendan como tú los beneficios. Mi mamá en su consulta de embarazadas permite a la futura mamá asistir con quien lo desee precisamente por esta razón.

7.- Aprovecha la practicidad de sólo necesitar tu teta: la lactancia materna es ante todo práctica. Si, es súper demandante, pero darle de comer a tu bebé es tan fácil como pegarlo al pecho. Lo mejor de esto es que permite muchas posiciones en las que puedes hacerlo descansando o incluso sin usar las manos (si usas un portabebé). No hay que preparar teteros, ni esterilizar utensilios… así que mi consejo es aprovecha la facilidad que te permite para tener la pañalera más ligera, despreocuparte de llevar teteros contigo y tener siempre la certeza que cuando tu bebé lo necesite le puedes ofrecer todo lo que necesita!

8.- Un tetero con tu leche que se lo dé papá: Aunque la de la teta es mamá, papá también puede darle de comer al bebé. Acostúmbrate a extraerte un poco de leche (preferiblemente con una bomba eléctrica) para que siempre puedas tener un tetero y que papá o la abuela se lo puedan dar al bebé mientras tu haces algo pendiente o descansas un poco.

Yo tengo una amiga que acordó con su esposo que una toma de la noche (9-10pm) se la daba él con tetero y así ella sabía que en ese momento ellos tenían un tiempo especial de «bonding» y ella tenía un tiempo para ella. Además esta práctica ayuda a que el bebé se acostumbre a tomar del tetero y le sea más fácil la transición si mamá volverá a trabajar y le quiere dejar leche extraída con quien sea que lo va a cuidar!

9.- Amamanta acostada y descansa: Amamantar se puede hacer en tantas posiciones que a veces las mamás no se atreven por miedo a «aplastar el bebé». Yo creo que el 80% del tiempo que amamanté en mi casa, lo hice acostada en mi cama aprovechando para así descansar. Es una posición fácil para mamá e hijo y ayuda a que te relajes y disfrutes el momento, incluso aprovechando de hacer una siesta conjunta si tu bebé se duerme. Además, cuando son muy pequeños y todavía no se dan la vuelta, es una posición fácil de dejar a tu bebé durmiendo y tu seguir con alguna labor, sin que se despierte al traspasarlo a la cuna!

10.- Sácate leche antes de darle pecho al bebe y no después: Parece contradictorio, pero la leche se forma de la succión de un bebé y no la de una bomba extractora. Por eso cuando hayan pasado 2 horas de la última toma y sientas los senos llenos, es el momento ideal para sacarte leche y guardarla. Si enseguida tu bebé se despierta o te pide teta, de sólo pegarlo se producirá leche que lo satisfacerá.

11.- Un poco de perspectiva: Nada me ayuda más en los momentos difíciles que recuperar un poco de perspectiva de todas la mujeres que algo largo de la historia y en las condiciones más distintas, adversas o ideales, han sido capaces de amamantar a sus hijos, pensar que hay situaciones en las que es el único recurso disponible y cómo esas madres no tienen opción de dar un tetero de fórmula puede ser un alivio y puede regalarte un poco de confianza cuando la tengas un poco baja o te ataquen las dudas.

12.- Siéntete orgullosa y celébralo! Siéntete orgullosa de los logros de tu cuerpo y del regalo que le estas dando a tu hijo a través de tu pecho! Así como la maternidad es un regalo y el embarazo es la viva muestra de cómo somos capaces de dar vida, la lactancia materna también es un regalo que nos brinda la posibilidad de seguir conectadas a nuestros hijos de una manera única e íntima que solo nos pertenece a nosotras. Y no se amamanta por siempre, es un período que pasa rápido, es un estadio de nuestros bebés de pura necesidad de nosotras. Así que tratemos de vivirla al máximo, disfrutándola y celebrando que nuestros pechos son capaces de regalarle vida a nuestros hijos!

El CALENDARIO LECHEYMIEL 2015 lo consiguen en la sede de lecheymiel, Caracas. Venezuela.

Pd: mi experiencia de amamantar por primera vez, una reflexión sobre nuestro instinto materno y el calendario lecheymiel 2013.