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Yo soy de las que piensa que ir al museo con niños es tremendo plan! Que en cada museo ellos encuentran diferentes formas de entretenimiento y se deleitan a su manera con las obras: ya sea por los grandes formatos, los espacios, los colores, los objetos… De cualquier manera es estímulo para su curiosidad y sus sentidos.

Mientras vivíamos en NYC fuimos a muchos museos con los Pirulingos, entre los días fríos y las visitas era un plan bastante común. Desde que llegamos a Houston era algo que teníamos muy pendiente, así que el último día de Spring Break, hace ya unas semanas, comenzamos explorando uno que ya sabíamos sería favorito: el Museo de Historia Natural!

Para Andres Ignacio es casi el paraíso! Mi Pirulingo y su fascinación por los animales se deleita con la recreación de habitats de todo tipo de especies. Luego su emoción estalla al llegar a los esqueletos y fósiles de dinosaurios y demás animales prehistóricos, veo sus ojos iluminarse mientras me pregunta sobre sus características y casi puedo ver su cabeza comenzar a volar imaginándose escenas de peleas entre estos gigantes! Para terminar en el Planetario y ver a mi chiquitín fantasear con viajes al espacio, misiones intergalácticas y trajes de astronauta!

Y en todas esas aventuras Eugenia lo acompaña, es su compañera y su cómplice y su cabecita también vuela, imagina y se asombra con cada paso que damos.

Sin duda regresaremos, sin duda es un excelente plan con niños en Houston o en cualquier ciudad con museos de este tipo. Sin duda los niños abren su mente y su capacidad imaginativa explota en estos lugares y se despierta una curiosidad que puede durar varios días en los que los juegos en el carro o la casa siguen siendo sobre dinosaurios de todo tipo conquistando el mundo!

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Publicado el 24 de abril de 2014