image

image

El Capitán Pirata y la princesa María Antonieta reportando sus aventuras de Halloween!

Comencemos por el principio: los disfraces. Porque hay una divertida historia detrás de esos lindos trajes. A principios de octubre comenzamos a revisar catálogos con disfraces que llegaban a la casa por correo. Andres Ignacio eligió ser un Jedi y Eugenia no se decidía, todos le gustaban. Sin embargo yo pensaba que, aprovechando que todavía puedo persuadirla fácilmente, le eligiría un disfraz dulce y lindo. Estaba entre Dorothy y Caperucita Roja y entre las dos decidimos Caperucita Roja.

Todo parecía estar decidido hasta que me llegó un email que presentaba la colección de disfraces h&m en una colaboración con Unicef (tienda en la que compro aprox. el 80% de la ropa de Andres Ignacio, sobre todo ahora que nos fuimos de NYC y abrieron tienda online!).

Vi la colección y todos los disfraces me gustaron! Eran disfraces diferentes, con mucho estilo y buenos precios que siempre es una excelente combinación. Entonces decidí presentarle el disfraz de Pirata a Andres Ignacio… Su única condición, que hubiese una espada involucrada, para lo que bastó ver un capítulo de Jake and the Neverland Pirates y así darse cuenta que su querido Jake, ejemplo Pirata en su vida, nunca sale sin su espada… Listo!

Eugenia por su parte quedó encantada con su traje de “Princess” que luego comenzó a llamar “Princess Marie Antoinnete”. Compré la peluca sin mucha esperanza de que Eugenia se la dejara poner pero para mi sorpresa le pareció fantástico eso de verse tan distinta en el espejo.

Vestidos y en personaje fuimos a una fiesta de cumpleaños, una feria de atracciones y juegos tipo parque de diversiones, y finalmente el día de Halloween a hacer Trick or Treat en la urbanización de unos amigos en la que decoran las casas y la gente se instala en los porches a esperar a los niños que buscan dulces.

Nada más lindo que ver ese desfile de niños disfrazados corriendo y disfrutando estar despiertos hasta un poco más tarde. Nada más amable que la gente que abre sus puertas para darles dulces y comentar sus disfraces. Nada más alegre que el ambiente de fiesta en la calle, las risas y las voces agudas repitiendo “trick or treat” “happy Halloween”. Nada más lejos del terror y el miedo de las figuras de zombies… Ya lo había comentado, yo me quedo con el Halloween de los niños, de los disfraces, de compartir y celebrar que por una noche nos podemos convertir en nuestro personaje favorito!

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image

image


Pd:

Halloween 2011 —-> aquí

Halloween 2012 —-> aquí