Porque cambiamos de coche para que nos cambiara la vida!

Sin exagerar!

Tenia un coche doble que fue perfecto para el primer año de mamá de dos, el año de Eugenia bebé… Pero era un coche pesado que solo servía para caminar por aquí cerca pero ni pensar taxi o metro… imposible…

Ahora con Eugenia caminando y cada día ganando más movilidad, con Andres Ignacio que quiere caminar todo el tiempo (hasta que se cansa) y con el verano en puertas y tantas ganas de hacer mil cosas por toda la ciudad…

Vendi el coche viejo, compré uno nuevo más liviano, más compacto y más facil de colapsar… y de nuevo hemos agaraddo algun taxi y de nuevo el metro es nuestro amigo…

Aqui les presento el mencionado… y algunos datos curiosos!

**El coche nuevo el día que lo estrenamos: todavía Andres Ignacio y Eugenia con cara de extrañeza.

**Aunque ya había frecuentes muestras de cariño en el coche anterior…

**Ahora se la pasan agarraditos de la mano! y yo desde arriba los veo derretida!

**Van todo el trayecto conversando en un idioma de ellos, comparten la merienda y el agua y tambien se pelean… pero la mayoría de las veces la interacción inspira ternura!

**De nuevo en Metro para poder visitar a Marco y a Puli en Brooklyn!

**Ya varias veces me han preguntado si son “twins”. Es un efecto de este coche que los hace ver más equiparados mientras están los 2 sentados.

**Tan liviano que hasta Andres Ignacio puede llevar a su hermanita!!!

NYC, here we go! Ya nada nos podrá detener!!!